En primer lugar, la talla es muy importante porque si te quedan grandes se corre el riesgo de que se te caigan los objetos de las manos. Después de cada uso hay que enjuagarlos bien y guardarlos en un lugar frío y seco. Es muy bueno frotarlos por dentro, de vez en cuando, con talcos, para que entren fácilmente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario